La voz de Leonard Cohen, mucho más profunda que el título de su canción.
Las palabras certeras, la cadencia de mantra.
Quizá me queden muchos kilómetros por conducir,
muchas promesas que cumplir,
lo dejas todo atrás para poder sobrevivir
a thousand kisses deep,
a mil besos de profundidad.
El alma reflejada en el espejo de lo cotidiano.
Mirando desde el otro lado de una ventana nocturna y urbana, con un cigarrillo en la mano, cosiendo sus heridas con versos, Leonard Cohen.