Cosas que le pasan a este farandulero cuando NO está en el escenario

Me duele una anatomía incierta, rara.
No me la ubico.
Y por eso estoy tentado algunos días
de decir que no me duele.

Pero me duele.
¡Vaya si me duele!

Dentro del amplificador que forman mis costillas…
entre el bazo y el brazo…
este otro costado…
No sé bien.

Miro hacia atrás y se me pasa.
Será el mover el cuello, el levantar la vista…
Presiento que no estás,
que te has marchado.
Y al presentir me duele una anatomía imprecisa, rara.

Será quizá ese órgano donde cristalizan los abrazos.

 

Publicado en a2manos 30/08/2007